Quedan 18 meses para las próximas elecciones municipales, y después de subir los impuestos de manera continuada hasta algo más de un 45% acumulado en los últimos cuatro años. Ahora, es cuando llega el equipo de gobierno de IU, con el voto favorable, como no, de la oposición de PP+PSOE, con una bajada en el IBI, que tampoco es como para tirar cohetes, pero que tiene como contrapartida, el aumento de tasas y precios públicos.
Pero lo más chocante del caso es, ¿cómo es posible bajar impuestos ahora cuando tenemos un déficit galopante que se lleva casi el 50% del presupuesto, mientras se suben tasas y por otro lado se recortan o suprimen servicios y prestaciones públicas?.
Esta misma pregunta vale para San Fernando.
La incoherencia es obvia, como claro es el pretendido engaño a los ciudadanos buscando el titular de que BAJAMOS LOS IMPUESTOS.
Los mismos que han dilapidado recursos públicos en un despilfarro y mala gestión como la que IU ha realizado en San Fernando, siendo el asunto de PLAZA DE ESPAÑA el culmen del mal hacer y del "chanchulleo político"...
Los mismos que han subido el IBI en corto espacio de tiempo todo lo que no lo han subido progresivamente en 15 años, porque los ingresos extra venían de otro lado, y eran gastados en obras dirigidas por el interés electoralista más que por la conveniencia productiva y más óptimo desarrollo del pueblo. Esos mismos, pretenden ahora, ENGAÑAR a los vecinos, con una bajada de impuestos más efectista desde el punto de vista mediático que beneficiosa y pertinente.
Los impuestos son un instrumento de gestión económica, y muchos pensamos que es importante ser claros con los vecinos, la cuestión no es si se suben o bajan impuestos, sino que impuestos se suben o bajan o cuando o para qué se suben o bajan.
Los servicios tienen un coste, su sostenimiento no es gratis, desde luego hay que buscar que los tributos sean progresivos para que pague más el que más tiene, dando facilidades a todos... pero sin duda, el déficit hay que atajarlo, pues de lo contrario no es sostenible el mantenimiento de muchos servicios que muchos dicen defender, pese a que su gestión no haya sido las más adecuada para posibilitarlo. Para conseguir ese equilibrio, o menor desequilibrio, una de tres:
1º O se suben impuestos y se reducen gastos, con lo que se reduce el déficit y la deuda (lo que deprime el consumo y resiente la economía).
2º O se suben impuestos y se mantiene el gasto, con lo que se mantiene el déficit y se incrementa la deuda (cosa que hace el gobierno de Rajoy).
3º O se mantienen impuestos y se va reduciendo el gasto prescindiendo de lo superfluo para priorizar en lo esencial con criterio social, explorando sistemas de gestión mixtos para ciertos servicios.
Esas son las alternativas que hay, nosotros apostamos por la última, lo que desde luego no significa que no nos guste pagar menos impuestos, pero claro, cuando sea posible, y recuerden algunos, que si hoy vamos a pagar más impuestos que antes por los mismos o peores servicios, es por la nefasta gestión que los que ahora están gobernando han hecho de los recursos públicos, así hoy, carecen de medios para preservar lo que son servicios esenciales.
Aprendamos pues, para no errar en lo mismo y con los mismos.
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