EL PARO CRECE Y EL CONSUMO SE RESIENTE A MÍNIMOS HISTÓRICOS GENERANDO MENOS ACTIVIDAD Y MÁS DESEMPLEO. LAS POLÍTICAS DE AJUSTE POR SÍ SOLAS AGRAVAN LOS EFECTOS DE LA RECESIÓN. ESTA DINÁMICA YA FUE ESTUDIADA POR KEYNES.
Desde el FMI reconocen:
"Hemos encontrado que los autores de los pronósticos subestimaron significativamente el incremento del desempleo y la caída en el consumo privado y la inversión asociados a la consolidación fiscal", indica el documento, firmado por el economista jefe del Fondo, Olivier Blanchard, y Daniel Leigh.
Pero es obvio que, los neoliberales, no leen mucho a Keynes, sino a su rival ideológico y gran detractor Friedman, que fue ciegamente seguido por Ronald Reagan y Margaret Thatcher en los años 80 del pasado siglo XX, y en cuyos postulados ultra liberales, está el germen de la presente grave crisis global.
John Maynard Keynes, sentó las bases del desarrollo económico occidental de la postguerra, época de una gran crecimiento económico en los 50 y 60, basada en parte en los bajos costes de las materias primas y de la energía -petróleo-, así como la pujanza demográfica y la reconstrucción de las economías de los países desarrollados. A él se debe el concepto de "economía mixta", de un mercado libre, que solo es intervenido por el estado en aquellos aspectos donde su dinámica no se autoregula generando graves disfunciones. Su modelo económico posibilitó el desarrollo del ESTADO DEL BIENESTAR, y un más equitativo reparto de la riqueza propiciada por el crecimiento, basada en el desarrollo por parte del estado de políticas que avanzasen en la efectiva "práctica igualdad de oportunidades", donde el acceso a la sanidad y especialmente a la educación y formación son fundamentales (ascensores sociales).
Es cierto que el Keynesianismo, representado en parte en nuestros días por Paul Krugman, no respondería al mismo recetario de medidas aplicado en los años posteriores a la gran depresión, la economía de guerra occidental o a los años 50 y 60 del pasado siglo. Pero una cosa está clara, sólo con austeridad y recortes no se sale de la crisis, sino que se propicia que las clases medias y trabajadoras se empobrezcan, incrementando las desigualdades y tensiones sociales, los ricos son más ricos y los pobres más pobres., a la par que la caída de ingresos, impide al estado arbitrar recursos para políticas sociales que mitiguen los efectos de ese incremento de la pobreza y limite esas desigualdades.
Los liberales arguyen en pro de la libertad de acción en lo económico para evitar el papel regulador de los estados. Pero parece evidente, que la ambición y el egoísmo humanos, llevan a que a veces se haga un mal uso de la libertad, y en materia económica, esa libertad mal utilizada sin que nadie supervise o regule ciertas prácticas, termina conculcando derechos y libertades de otros., que por lo general suelen ser la mayoría. La subordinación de la economía al interés general, no es limitativa de la libertad de mercado, siempre que el uso que se haga de la misma, no sea contraria al interés general de la sociedad. A mi, me parece ese un concepto mucho más realista, justo y avanzado, que la UTOPÍA COMUNISTA o el ULTRA LIBERALISMO ECONÓMICO, pues es un concepto intermedio, mucho más razonable y respetuoso con la libertad de empresa y de mercado, a la par que no se pierde de vista el interés social.
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